Libros deuterócanónicos

Pbro. Ernesto María Caro

Continuando con nuestra catequesis acerca de la división de los cristianos y nuestro camino hacia la unidad, nos podríamos ahora preguntar, ¿es que todas las Biblias son Iguales? podríamos responder sencillamente que SI. Todas la Biblias cristianas han sido traducidas de los textos originales, es decir para el Antiguo Testamento, del Hebreo, y para el Nuevo Testamento del Griego. Ordinariamente lo que difiere no es el texto sino la interpretación que se hace de éste. Por otro lado, Lutero adoptó como modelo del AT el Canon “Palestinense”, es decir, los libros que los judíos reunidos en el Concilio de Jamnia (ca.70) consideraron que eran, o debían ser, los libros inspirados y canónicos. Con ello rechazaron el Canon Alejandrino o de los LXX (como se le suele llamar) que la Iglesia siempre ha aceptado como canon del AT. La diferencia entre uno y el otro básicamente es que el canon alejandrino (en la Biblias Católicas y Ecuménicas) contiene 7 libros más que el Palestinense. Estos libros son: Tobías; Judit; 1a y 2a Macabeos; Eclesiástico; Sabiduría y Baruc y son conocidos como “déutero-canónicos”. Actualmente han sido incorporados a las Biblias Ecuménicas (Dios habla hoy y Dios llega al hombre. Las dos de “Sociedades Bíblicas Unidas”, con aprobación del CELAM). Podríamos decir que las Biblias de nuestros hermanos separados contienen 7 libros menos que las nuestras.