Dios en el AT y NT

Pbro. Ernesto María Caro

Pregunta:

Padre, me gustaría que ahondara en el tema de ¿Por qué en el Antiguo Testamento Dios fue “pintado” como un Dios castigador (el diluvio, Sodoma y Gomorra, las plagas, etc.), muy contrario a como lo conocemos por el Nuevo Testamento: un Dios de amor, de Misericordia? Muchas Gracias.

Respuesta:

Mi querido hermano: Para poder entender las imágenes de Dios, así como de otros personajes y situaciones del Antiguo Testamento, debemos trasladarnos a los momentos en que estos son referidos históricamente y desde ahí ubicarnos en la cultura y el pensamiento que se tenía en ese momento. Todo esto, porque Dios actúa en la historia concreta y por ende, asume la cultura y el pensamiento de quienes habrán de encontrarse con él y con su obrar. Antes de ahondar en este punto, te propongo como una figura que nos ayuda grandemente a comprender este aspecto de la Historia de la Salvación, el caso de las apariciones de la Santísima Virgen María en su advocación de Guadalupe.

Todos sabemos que María Santísima, la Madre de Jesús, debió ser una mujer mediterránea, con facciones blancas, y que se vestía a la usanza de su época. Sin embargo, en su aparición en México, aparece con todos los rasgos de nuestros indígenas, morena, con los ojos rasgados, y con indumentaria que podía ser interpretada por su vidente y después, dado que dejó su imagen, por quienes la vieran. Lo mismo pasa a lo largo de toda la historia de la Salvación.

La imagen de Dios siempre ha sido la misma que Jesús nos ha revelado, la de un Padre lleno de amor. Un padre que algunas veces tienen que amonestar, e incluso, castigar a su hijo Israel porque no ha obrado bien. En el fondo de toda la historia de Salvación siempre se transluce, el Dios de misericordia que nos revela el Nuevo Testamento.

Ciertamente que las imágenes que nos presenta el Antiguo Testamento están adaptadas a la mentalidad de quienes las vivieron y de quienes las escribieron. Por otro lado, recuerda siempre que la biblia no es un libro de historia como lo conocemos nosotros. La biblia nos narra la historia de la salvación que Dios ha realizado en la humanidad. Por ello, los relatos, más que decirnos lugares, personajes y fechas precisas, nos presentan el actuar de Dios mediante signos teológicos. En este sentido se expresa el Catecismo de la Iglesia Católica:

“En la condescendencia de su bondad, Dios, para revelarse a los hombres, les habla en palabras humanas: «La palabra de Dios, expresada en lenguas humanas, se hace semejante al lenguaje humano, como la Palabra del eterno Padre asumiendo nuestra débil condición humana, se hizo semejante a los hombres” (CIC 109).

Por ello, es siempre importante recurrir a la enseñanza y guía de la iglesia a quien le ha sido confiada, la fiel interpretación de las fuentes de la revelación y evitar, así, caer en errores.

Sobre esto, ya el apóstol San Pedro escribía: “Asimismo en todas sus cartas (san Pablo) habla en ellas de esto; en las cuales hay algunas cosas difíciles de entender, que los ignorantes e inestables tuercen—como también tuercen el resto de las Escrituras—para su propia perdición” 2 Pe 2, 15.

Espero que esto ayude a tu fe y te impulse a tomar un curso de Sagrada Escritura que te permita comprender con mayor profundidad el mensaje de amor que Dios nos ha dejado en la Biblia.